Dimitry Medvedev es ese tipo que fue elegido Presidente de Rusia de 2008 a 2012 porque Putin no podía seguir en el cargo. La artimaña fue meter a Putin de Primer Ministro desde donde seguía en el poder.
Después, cambiadas las leyes a placer, Putin volvió de Presidente y puso a Medvedev de Primer Ministro. Y fue generoso con su mascota porque este hoy acumula más de millones de euros en patrimonio.
Recuerdo también que nos vendieron a Medvedev como una figura moderada y liberal, europeísta. En contraposición a Putin. Y que tenía un plan -decían- para democratizar Rusia.
Pero Medvedev no era nada. Un hombre de paja más. Un títere. Ahora cada día el «moderado» aparece en la Duma y en medios clamando por que se conquiste Kiev, se desmantele el régimen de Zelensky y se use la bomba atómica.
Ese es el auténtico Mervedev: Un esbirro al final de un hilo.